Siguiendo con la serie sobre costumbres irlandesas del post anterior llegamos al festejo más grande del año: el Día de San Patricio. Si bien esta celebración no se inició en Irlanda, sino en Estados Unidos por los millones de inmigrantes irlandeses que llegaban, el desfile en honor a este santo católico se ha vuelto ya en una tradición arraigada en el corazón de los dublinenses. Cientos de miles de personas se unen a atestiguar este evento carnavalesco para después pasar a los pubs para patrióticamente embriagarse, cosa que uno pues no puede evitar.
El tema del desfile tiene muy poco que ver con lo irlandés. Muchas bandas colegiales gringas vienen a desfilar y tocar sus tambores por lo que más banderas gringas que irlandesas acaban desfilando. Luego todo empieza a volverse muy Disney con globos gigantes y personajes fantásticos (como peces Elvis).
El inicio del desfile
Dragones voladores
Buho gigante (notese que uno de los edificios del fondo namas está pintado)
Un tradicional mosco de la merced.
Irlandeses festejando como si le hubieran ganado a Inglaterra en rugby (en realidad perdieron el día anterior)
La delegación mexicano española en acción
