DE TU ARTE A MI ARTE: Posters polacos

Bienvenidos sean a esta nueva sección artística del avión de papel titulada "De tu arte a mi arte...". Aquí hablaremos sobre las nuevas tendencias que influyen el aspecto artístico dentro del mundo del entretenimiento en diversas partes del mundo. Para comenzar hablaremos de un tema que ha llamado mi atención en los últimos días: los posters de películas hechos en Polonia.

Tras décadas de haber vivido en un profundo comunismo el público polaco se ha acostumbrado a un estilo visual particular, muy distinto al que se tiene en el resto del mundo ocidental, en cuanto a estética comercial. La omnipresente industria cinematográfica de Hollywood ha tenido que recurrir a la ayuda de artistas locales para promocionar sus filmes mediante nuevos pósters que van más allá artísticamente que los clásicos posters hollywoodenses, los cuales usualmente son simples fotos de los rostros de los actores photoshopeados en un fondo negro, o en un paisaje referente a alguna escena de la película, si bien les va.


Trading Places (John Landis,1984). La mediocre comedia donde un millonario (Dan Aykroyd) y un pordiosero (Eddie Murphy) intercambian lugares recibe un muy simbólico cartel con varios elementos bastante interesantes representantes del dinero, el capitalismo estadounidense y su fe en Dios. ¿Quién se imaginaría en nuestra sociedad que un póster así anunciara una película dominguera de Eddie Murphy?



Romeo and Juliet (William Woodman, 1983). El amor entre dos miembros de grupos rivales a muerte nunca había sido captado de esta manera.


Gremlins (John Dante, 1984). No siempre el resultado es lo esperado. ¿Qué significará que un juguete ataque a una persona con máscara de Santa Claus? ¿El inevitable destino apocalíptico del comercialismo?


Short Circuit (John Badham, 1986) Solución sencilla y llamativa para representar las aventuras del robot "Número 5".


Sex and the City (Michael Patrick King, 2008). La no muy dotada Sarah Jessica Parker necesitó de unos implantes para llamar la atención de los polacos.



Un Perro Andaluz (Luis Buñuel,1923). No sólo las producciones hollywoodenses reciben el tratamiento polaco, aunque en este caso parezca algo salido de una pesadilla de H. R. Giger.


A Clockwork Orange (Stanley Kubrick, 1971). El cartel original estaba bien... sólo necesitaba un monstruo felino abstracto saliéndole de la cara.


Cabaret (Bob Fosse, 1972). Nada mejor que una swástica de piernas sensuales para describir esta historia de coristas en plena Alemania nazi.


Blade Runner (Ridley Scott, 1982). Estilizadas pistoleras en bikini es lo único que se necesita mencionar para atraer al público al mundo retro futurista distópico de este clásico filme.


Planet of the Apes (Franklin J. Schaffner, 1968). Dos gorilas apareándose como humanos en la luna ¿fantasía pura o futuro inevitable?


Star Wars (George Lucas, 1977). Siguiendo el mismo estilo que el cartel de Blade Runner, aquí podemos apreciar como los hijos de Darth Vader se verían como bocetos de diseñador de modas.


Boogie Nights (Paul Thomas Anderson, 1997). En México podría ser la portada de un libro de texto de primaria, pero en Polonia representa la historia del actor porno Dirk Diggler.


Pulp Fiction (Quentin Tarantino, 1994). Andy Warhol estaría orgulloso a este homenaje a su persona. Notese el asombroso parecido a Uma Thurman.


The Elephant Man (David Lynch, 1980). El sentimiento de la triste y deforme vida de John Merrick queda plasmada en este afiche.


The Exorcist (William Friedkin, 1973). La marca del diablo queda plasmada en este cartel que honestamente no provoca en el espectador el suspenso macabro del poster original.

SUPERMAN: no es tán bueno como parece

A través de los años, se ha ido forjando en la mente del público en general la idea de que Superman es el superhéroe perfecto, un modelo a seguir en cuanto a moralidad y principios éticos se refiere. Temo decirles a todos aquellos que no están en contacto directo con el mundo de los cómics que esto está muy lejos de ser verdad. La realidad es que Superman es un auténtico cabrón, abusivo, envidioso, cruel y despiadado ser que se aprovecha de su superioridad física para humillar, molestar y abusar de sus más cercanos "amigos" y "compañeros", como Jimmy Olsen, su novia Lois Lane y cualquier miembro de la Liga de la Justicia que se le cruce en el camino. He aquí algunas muestras de sus cabronerías, cortesía de la página Superdickery.com. 

Flash: "¡Hola, Superman! ¿Qué te trae acá a Ciudad Central?" PUUUM!

Superman utiliza la impresionante velocidad de Flash para recibirlo con un sendo golpe cuando este sólo le daba la bienvenida a su ciudad.

Cuidado mujeres golpeadas indefensas, Superman viene para golpearlas más.

Superman: "¡Sí, Lana... es verdad! ¡Yo maté a Lois Lane!"

Ninguna mujer indefensa se salva de Superman, ni su propia novia.

Superman no pierde el tiempo y se pone a fajar con otra en la propia tumba de la madre de su hijo.

Jimmy Olsen: "Superman... esta broma ha ido muy lejos. ¡No me quiero casar con la mujer King Kong!"

Superman: "Lo siento Jimmy, pero como el médico brujo local, los declaró ¡marido y mujer!"

Superman adoptó a su amigo Jimmy Olsen como hijo, sólo para humillarlo de las formas más extrañas. 

Superman: "¡Admítelo Lois! ¡Siempre estuviste celosa de Lana ya que fue mi novia cuando yo era Superboy y por eso la mataste! "

Batman: "Soy el detective más grande del mundo... ¡pero no puedo encontrar ninguna evidencia para salvar a Lois de la pena de muerte!"

Batman sabe que Lois es inocente y que no mató a Lana, sin embargo, Superman es el primero en querer mandar a su novia a la silla eléctrica.

Robin no tendrá super poderes, pero bien que Batman y Superman les encanta tenerlo de perra.

Superman: "He aquí caballeros... ¡la famosa Baticueva!"

Batman: "¡Santa Cachucha! ¡Superman esta revelando nuestra identidad secreta!"

Señora: "¡Superman! ¡Nos estamos muriendo de sed! ¡Dejanos beber algo de agua!"

Superman: "Nadie beberá ni una gota".

Aunque no lo crean, esta no es la única vez que Superman le ha negado agua a los sedientos.

Superman: "Jimmy, este regalo que me diste del día del padre me hace arrepentirme de haberte adoptado como hijo. ¡Lo tendré que destrozar para darte una lección!"

Jimmy Olsen: "Pero... Superman... que diga papá... ¿qué hice de malo?"

Superman trabaja en la autoestima de su nuevo hijo.

Superman: "Bah, estos regalos que sus países me mandan no les ganarán ningún favor. Ahora que soy rey del mundo mi primera orden es que todas las naciones cambien su bandera por una bonita bandera de Superman como esta de aquí."

El poder absoluto corrompe, de una manera especial a Superman (Nótese el carismático sombrero de Papa que trae puesto como corona)

Muchachito: "¡Superman! ¡No te quedes ahí sentado! ¡Deten esa cosa antes de que destruya Metrópolis!"

Superman: "Eso es justamente lo que estoy esperando que haga."

Nótese la cara de disfrute que tiene Superman.

Mr. Miracle: "Superman y... ¿mi esposa?"

Al roba esposas de Superman no se le va una.

Superman: "Síganme, hormigas soldado... bzz, bzzz... debemos capturar a Lois Lane... bzz, bzz,... ¡ella será nuestra reina!"

Cualquier pretexto es bueno para invadir a la humanidad.

Superman: "¡Alto! Yo construí esta isla... ¡pero nadie puede aterrizar en ella!"

Un ejemplo más de la envidia de Superman, no querer compartir su paraíso personal con nadie.